(28 de agosto de 2022)
(Solemnidad de San Agustín)
Monición de entrada:
Queridos hermanos. El Señor hoy nos dice que la humildad es el camino más indicado para llegar hasta Él. O dicho de otra manera, con la humildad, se nos abrirán de par en par las puertas del cielo. Sed bienvenidos a esta celebración y que el Señor nos ayude a ver en la pequeñez la grandeza y el secreto para vivir en Él y con Él.
ORACIÓN DE LOS FIELES
Humildad y sencillez, esa es la receta. Esa es la senda que nos lleva al Padre y que prepara nuestro corazón para acoger a Cristo. Le pedimos a Él que nos dé fuerza para perseverar en su camino.
1.- Por la Papa Francisco, los obispos, sacerdotes y todas las personas consagradas, para que hagan de su vida un continuo servicio al hermano desde la hu
2.-Por la paz en Ucrania. Para que Dios toque las mentes y los corazones de los responsables en la tierra, para que hagan prevalecer el diálogo y antepongan el bien de todos a los intereses particulares. OREMOS
3.- Por los que sufren en el cuerpo o en el alma, los que están sin trabajo o viven lejos de sus familiares, para que encuentren consuelo en todos los que viven a su alrededor. OREMOS
4.- Por los que han disfrutado de este tiempo de descanso para que vuelvan con más ilusión a sus quehaceres diarios siempre en compañía del Señor. OREMOS
5.- Por todos aquellos que dedican su tiempo a ayudar a los demás. OREMOS
6.- Por todos nosotros, para que vivamos de forma sencilla, siempre atentos a la Palabra de Dios, y alimentados con su Eucaristía. OREMOS
Padre Nuestro, atiende estas necesidades que humildemente tu pueblo confiado te presenta. Por JCNS
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Bendito seas, Dios del amor gratuito y de la grata sorpresa, porque humillas al que se engríe y enalteces al que se humilla.
Con quien primero obraste así fue con Jesucristo, tu Hijo.
Él consiguió la gloria más esplendorosa por la vía de la máxima humillación, porque él comenzó por practicar lo que nos enseñó: Quien quiera ser el primero, que se haga el servidor de todos.
Concédenos, Señor, seguir su ejemplo y su enseñanza para saber estar y vivir en relación contigo y con los hermanos.
Danos un corazón grande y humilde para acoger como pobres tu amor, tu gracia, tu misericordia, tu perdón y tu reino, y poder ser enriquecidos con la aportación de los demás. Amén.